A mi hijo siempre le ha encantado el fútbol. Antes estaba federado y era el portero de su equipo. En uno de los partidos chocó con un rival y, debido al golpe, perdió completamente la audición del oído derecho. Solo tenía 15 años, pero a raíz de todo aquello le echaron del equipo y ya no ha vuelto a jugar. Ahora tampoco podrá trabajar en determinadas profesiones, porque su minusvalía le impedirá ser policía, controlador aéreo, o cualquier otra para la que se requieran los dos oídos. Pero no he iniciado este texto para dar pena por su discapacidad. Aunque tiene sus limitaciones, afortunadamente puede llevar una vida normal. He iniciado esto porque hasta que no te pasa algo así no te das cuenta de todo lo que os voy a contar. |
|
Si durante un partido tienes un accidente que termina en una lesión permanente e irreversible como la de mi hijo, recibes una indemnización por minusvalía, pero si te fijas en las cantidades y las comparas con otros países de nuestro entorno, te echas a llorar. |
|
|
|
En España cuando te federas en un equipo de fútbol o de cualquier otro deporte, tienes que pagar un seguro de accidente. 93 euros al año pagaba yo. Lo que significa que si solo en fútbol hay un millón de federados (datos de 2.018) entre todos estamos pagando cerca de 100 millones de euros. Sin embargo la indemnización que te dan si te quedas tetrapléjico, por ejemplo, son 12.000 euros. 12.000 frente a los 4.000.000 en el caso de Francia, 700.000 en Gran Bretaña o 120.000 en Portugal. |
|
Si lo que te ocurre es que pierdes el 100% de un oído, 2.400 euros. O ni un solo euro si pierdes un testículo, como le ocurrió al hijo de una amiga mía practicando taekwondo. Esta diferencia es vergonzosa, sí. Pero lo es más todavía si encima se está incumpliendo una ley. A día de hoy se siguen pagando las indemnizaciones que marca el Real Decreto 849/1993, sobre prestaciones mínimas del Seguro Obligatorio Deportivo, una normativa de 1993 donde se indica claramente que "las indemnizaciones se deberán actualizar en un plazo no superior a 3 años”. Han pasado nada más y nada menos que 28 años y esas indemnizaciones siguen sin actualizarse, maximiliano. Han visto pasar ministros de Deporte de un lado y del otro, pero ninguno se ha dignado aún a cumplir la ley. Por eso he creado esta petición. Porque para mi hijo ya es tarde, pero hay millones de niñ@s, chavales y adult@s que están federados en distintos deportes y que hoy mismo pueden sufrir una lesión. Contra un poste, una canasta, un rival… y desgraciadamente alguna de esas lesiones podría ser irreversible y necesitar una indemnización. Pedimos cumplir la ley y actualizar estas indemnizaciones. |
|
|
|
Porque si estás pagando anualmente un seguro lo mínimo es que se cumpla la ley. Y porque hay muchos gastos asociados a determinadas incapacidades que muchas personas no se podrán financiar salvo que reciban una buena indemnización. Sr. Miquel Iceta, actual ministro de Deporte del Gobierno de España, es su obligación cumplir la ley y actualizar las indemnizaciones reflejadas en el R.D.849 del año 1993. En su conciencia quedará si sigue el mal ejemplo de los ministros anteriores, no haciendo absolutamente nada, o si decide hacer lo justo y actualizar las cantidades como obliga la disposición adicional primera del mismo Decreto Ley. Y a ti que estás leyendo esto, firma mi petición haciendo clic aquí por favor. Y difúndela para poder sumar cuantas más firmas mejor. |
|
|
|
Esto es fácil de solucionar, pero hasta ahora nunca ha habido voluntad. Seamos tantos que tengan que escucharnos y pongan al fin una solución. Gracias no solo en mi nombre sino en nombre de l@s niñ@s y adultos que están federadas en nuestro país. |