La Organización de las Naciones Unidas (ONU), designó el 28 de enero Día Mundial por la Reducción de las Emisiones de CO2 o Día Mundial de la Acción frente al Cambio Climático. ¿Y por qué lo hizo? ¿Por qué la ONU es una organización comunista😂¡No! Porque los informes que encarga a lo mejor de la ciencia mundial indican 1) que el cambio climático puede llegar a ser irreversible; 2) que la causa principal es la quema de combustibles fósiles (gas, petróleo y carbón) que emite CO2 y otros gases de efecto invernadero. 

¿Cómo van las emisiones hasta ahora?

Pues a nivel mundial siguen aumentando: cada año emitimos más que el anterior. Sólo en 2020, el año de la pandemia del COVID-19, se consiguió bajar las emisiones, como consecuencia del confinamiento. Pero rápidamente hemos vuelto a la vida anterior, en 2021 alcanzamos un nuevo récord, que hemos vuelto a superar en 2022, con 36,6 gigatoneladas de CO2. Este año la concentración de CO2 en la atmósfera ha alcanzado 417.2 ppm en 2022, más de un 50% por encima de los niveles pre-industriales (278 ppm). 

 

¿Y las emisiones en Europa y España?

En Europa las emisiones han disminuido desde la década de 1990, y en España han descendido desde nuestro máximo en 2007 (el año en el que comenzó la crisis). En España también descendieron las emisiones el año de la pandemia, pero desde entonces hemos vuelto a crecer, tanto en 2021 como en 2022, perdiendo la ventaja que ganamos en 2020. En 2022 emitimos 305 millones de toneladas de CO2 equivalente, lo que supone un 5,7% más que en 2021, cuando fueron 288,6 millones

Histórico de las emisiones brutas de Gases de Efecto Invernadero / Gráfico: MITECO

Histórico de las emisiones brutas de Gases de Efecto InvernaderoGráfico: MITECO

Así, a pesar de que las emisiones en Europa y en Estados Unidos (también desde 2007) están reduciéndose, las emisiones a nivel mundial siguen aumentando, porque otros países siguen aumentando sus emisiones. Sus emisiones a lo largo de la historia, y sus emisiones por persona son menores que las nuestras, y por tanto consideran que tienen derecho a seguir emitiendo gases de efecto invernadero, emulando la trayectoria que durante más de dos siglos han tenido los países occidentales.

Consecuencias

Y las emisiones siguen creciendo mientras los estudios científicos indican que estamos en un grave riesgo, y que estamos a punto de cruzar un límite (1,5 ºC) en el que puede que no haya vuelta atrás: si las grandes zonas heladas, como la Antártida, el Ártico o Groenlandia se derriten más allá de un límite, se producirá un proceso en cascada por el cual cada vez se derretirán más rápido y será más difícil pararlo. Esto a su vez podría distorsionar las corrientes oceánicas, cambiando por completo los climas a los que las personas estamos acostumbradas. 

Todos tenemos que tomar conciencia del problema y contribuir a las soluciones. Pero no todos tienen la misma responsabilidad ni capacidad de actuar. Debemos exigir a los responsables políticos que tomen la iniciativa, empezando en el caso español por el Gobierno.

5 acciones clave para resolver la crisis climática: 

  1. Aprobar un nuevo objetivo de reducción de emisiones en 2030 de -55% con respecto a 1990, y un objetivo de reducción de emisiones netas a cero en 2040.
  2. Transición acelerada a un sistema 100% renovable, eficiente, inteligente y en manos de las personas con perspectiva de género. 
  3. Dejar de quemar carbón antes de 2025 y dejar de quemar gas en 2030. 
  4. Volantazo en el sector del transportedejar de depender del petróleo reduciendo el transporte más contaminante, como los vuelos cortos o los jets privados, e impulsar los transportes limpios, colectivos, alimentados con energías renovables y de bajo coste para sus usuarios. Rebajar los precios del transporte público y el tren. Eliminar los privilegios de las empresas contaminantes, como las subvenciones y los beneficios fiscales, para que paguen y estos fondos se puedan usar en una transformación verde y justa de nuestro sistema de transporte.
  5. Evitar el greenwashing y las trampas al clima, que malgastan recursos en falsas soluciones o generan nuevos problemas

¿Por qué no lo hacemos? 

Pero, si tenemos los recursos, si la transición energética tiene ventajas (las renovables son más baratas, son mejor para la salud, dejaríamos de depender de regímenes poco democráticos)… ¿por qué no lo hacemos? 

La respuesta nos la dio la revista Science esta semana: las grandes empresas petroleras, como ExxonMobil, llevan trabajando para que no lo hagamos desde 1970, invirtiendo cada año millones de dólares. Esto hace que desde la política se haya hecho muy poco para cambiar la situación. Incluso personas en la política que han intentado cambiar las cosas, se encuentran oposición y presiones por todos lados. Incluso Antonio Guterrres, el secretario general de la ONU, ha denunciado que las empresas de combustibles fósiles han ocultado los daños que provoca su negocio, igual que hacían las tabacaleras. Guterres también repite que el gas, el petróleo y el carbón están poniendo en peligro la supervivencia humana, y ha exigido que se aumenten los impuestos a estas empresas para poder hacer frente a las consecuencias de sus negocios.

Todas las personas podemos hacer mucho en nuestro día a día para reducir nuestras emisiones, pero sin duda los gobiernos (locales, regionales y estatales) son los que pueden conseguir los cambios de escala que necesitamos. Y esto, sin presión ciudadana, no lo vamos a conseguir, porque el poderde la industria es muy fuerte y no va a parar. Tenemos que forzar, empujar y liderar a nuestros ayuntamientos y gobiernos para que hagan los cambios que necesitamos. ¿Cómo? Acudiendo a movilizaciones, organizando protestas, instalando renovables, aislando nuestras casas, votando a las opciones que propongan estos cambios, etc…