Soy Jairo González, responsable adjunto de proyectos en el este de África. En los quince años que llevo trabajando en Médicos Sin Fronteras, pocas veces he visto una crisis tan grave como la que está viviendo Somalia.

Los somalíes se enfrentan a una de las peores sequías en décadas: los pozos se han secado, las cosechas se han perdido y la falta de pastos ha diezmado el ganado. Cientos de miles de personas necesitan ayuda humanitaria para sobrevivir y se han visto forzadas a desplazarse en busca de alimentos, agua potable y atención médica. Esta sequía ya es peor que la que originó la grave crisis nutricional de 2011.

Piensa que, en los centros de atención en Baidoa, llevamos meses viendo signos alarmantes de desnutrición en niños y niñas. Cuando llegan, les medimos el contorno del brazo con un brazalete llamado MUAC; muchas veces, no llegan a los 100 mm, que es poco más de lo que mide una moneda de dos euros.

Además de la sequía, el hambre y la violencia recurrente, los somalíes, en especial las familias desplazadas, también están luchando contra brotes de enfermedades fácilmente prevenibles, que se encuentran entre las principales causas de mortalidad en niños, como el sarampión (hace más de un año que estalló un brote) y el cólera. Esta mortalidad se dispara cuando se combinan la falta de agua, la desnutrición y el sarampión.

Con tu colaboración, Maximiliano, podemos evitar muchas muertes infantiles gracias a los alimentos terapéuticos preparados, una pasta que contiene todos los macro y micronutrientes que necesitan los niños con desnutrición grave. Su uso permite que más del 85% de estos pequeños se recuperen en seis semanas. Te aseguro que emociona comprobar cómo la mayoría recobran su energía a los pocos días y empiezan a reír y a jugar como antes.

Necesitamos tu ayuda con urgencia porque la situación nutricional en Somalia, lejos de mejorar, se está agravando. Ya estamos viendo signos de desnutrición en mujeres embarazadas y lactantes, lo que nos ha obligado a incluirlas también en nuestros programas nutricionales.

Para que te hagas una idea, con 30 € harás posible que compremos 103 raciones de alimento terapéutico para tratar a más niños con desnutrición.

Te aseguro que la situación en Somalia es muy grave y por eso te pedimos un donativo extraordinario. Quiero que sepas que seguiremos trabajando sin descanso para llevar nuestra asistencia a tantas personas con desnutrición como podamos. Cada euro cuenta para ayudar a que salgan adelante. Si finalmente colaboras, te informaremos de la evolución de este proyecto.