Soy viuda y he trabajado toda mi vida en el hogar. Hace unos meses falleció mi marido y como te puedes imaginar el duelo no está siendo fácil. Ahora se habla mucho del empoderamiento de las mujeres, pero… ¿y el desempoderamiento de las viudas? Se nos muere nuestro amor, compañero de vida, nuestro todo y nos quedamos con los créditos que pedimos hace unos meses, la contribución, la luz, el agua, el gas y todo casi como antes pero el Estado nos reduce la pensión a la mitad.
Esto sucede porque en España, salvo algunas excepciones, las viudas sólo tenemos derecho a poco más de la mitad de la pensión que cobraban nuestros maridos. Con está pensión muchas viudas y familias no pueden sobrevivir, por eso pido algo muy sencillo: que podamos cobrar por lo menos el 75% de lo que cobraban nuestros maridos. Entiendo que no cobremos el total pero al menos pido una cantidad proporcional a los gastos que tenemos. No es justo que arruinen a las viudas en el momento más duro de sus vidas.
¿De qué sirve que mi marido haya estado toda la vida trabajando? ¿Es que mi trabajo en el hogar no es válido para tener un sueldo digno? Nosotras, las amas de casa, también trabajamos para sacar una casa adelante y merecemos una vida digna. Nuestro trabajo y el de nuestras parejas ES IMPORTANTE. Por eso exigimos que se nos escuche y se pongan soluciones a la precariedad a la que se nos condena cuando fallece nuestra pareja.
Cualquiera que tenga un caso cercano sabrá que ser uno menos en casa no reduce los gastos al 50%. Firma y pide al Ministerio de Inclusión y Seguridad Social que las viudas podamos cobrar al menos el 75% de la pensión. Hagamos que empaticen con las viudas, con nuestro dolor y nuestra indignación. Lo que me ha pasado a mi podría pasarle a cualquiera. ¡Firma y comparte con tus contactos! ¡Si conseguimos ser much@s estoy segura de que nos escucharán!
Las viudas también existimos y necesitamos que nuestras voces se escuchen urgentemente. Por favor, firma esta petición y consigamos que los derechos de las viudas sean una prioridad política.
¡Muchas gracias por tu apoyo!
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