Queridos amigos y amigas:

La Amazonía no está muriendo. La están matando. 

Hace 6 mil años que mi pueblo venera esta selva, que es la mayor fuente de vida que tenemos en el planeta.

Pero los gigantes petroleros no lo ven así y se dedican a llevar a cabo sus actividades extractivas precisamente en los puntos más rebosantes de vida, derramando su negro veneno, contaminando los ríos y avivando la fiebre climática. Están matando la selva y la riqueza biológica que alberga.

Ahora, estas mismas compañías se disponen a “engrasar” las negociaciones de la conferencia de la ONU sobre cambio climático que empieza MAÑANA en Dubai. El encuentro estará presidido por un magnate del petróleo y ya hay cientos de grupos de presión de la industria frotándose las manos.

No podemos permitir que hablen en nombre de la Amazonía.

Las negociaciones están a punto de empezar y tenemos la firme intención de que nadie pueda callar la voz que más importa: la nuestra. No solo habitamos la selva, sino que formamos parte de ella. Somos los suruí, los baniwa, los karipuna, los ashinka y muchos más, y no nos rendiremos hasta que se nos escuche a TODOS. 

Si recaudamos lo suficiente, podremos enviar una potente delegación de líderes y de coordinadores de campañas de Avaaz a la cumbre para hablar cara a cara con las autoridades y frente a las cámaras. Nos enfrentaremos a varias de las multinacionales más poderosas de la Tierra y no podemos hacerlo solos.

Ayúdanos a impulsar un levantamiento indígena para prohibir los combustibles fósiles en la Amazonía. Te prometo que nadie defenderá la selva como nuestros pueblos. Dona ya lo que puedas con un clic:

Mi padre, el gran jefe Almir Suruí, me inculcó la importancia de escuchar a las estrellas, al viento, a los animales y a los árboles, que ahora se suman a nuestras súplicas.

El planeta se está calentando. Los animales están desapareciendo y las plantas ya no florecen como antes. Hay más especies vegetales en la Amazonía que estrellas se ven en el firmamento, ¡y mira lo que les están haciendo!


Foto: @chamiltonjames

Avaaz ha sido una fiel aliada en nuestra batalla por defender la selva. Tu apoyo ha permitido que las comunidades indígenas se coordinen, planifiquen estrategias conjuntas y hablen con una sola voz. El siguiente paso es conseguir que nuestro discurso resuene en los salones del poder pero, para ello, te necesitamos. Con tu contribución, Avaaz podría:

• Reunir a prominentes representantes indígenas de la Amazonía con las autoridades que asistirán a esta conferencia de la ONU tan crítica para nuestra selva.
• Atraer la atención de los medios organizando acciones en el exterior del recinto del encuentro para reclamar que las medidas de protección de la Amazonía entren en la agenda política.
• Proporcionar a los líderes amazónicos el apoyo de los fantásticos equipos de prensa e incidencia política de Avaaz para que nos ayuden a conseguir medidas legales de protección para nuestros territorios.
• Facilitar que las comunidades indígenas acudan a todas las negociaciones clave del año que viene y así incrementar nuestras oportunidades de luchar para proteger la selva.
• Financiar la labor de Avaaz en defensa de la Amazonía creando un centro neurálgico de coordinadores de campañas y expertos legales que se enfrenten a la industria minera, maderera y petrolera.

La Amazonía es el ecosistema más complejo del planeta y mi pueblo forma parte de ese entramado. Si una amenaza letal se cierne sobre la selva, también supone un riesgo para nuestra supervivencia. El destino de la Amazonía pende de un hilo y nuestra voz debe ser escuchada. Dona ya lo que puedas:

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La Amazonía no necesita héroes, sino voces sabias que resuenen con la profundidad de la selva y la claridad de las aguas que la sostienen. La urgencia nunca había sido tan grande y debemos seguir peleando incansablemente. La supervivencia de la Amazonía depende ahora de nuestra unidad, y tu apoyo podría ayudarnos a incitar un alzamiento histórico para salvarla.
Por la vida silvestre,

Txai Suruí, miembro de la comunidad indígena brasileña de los paiter suruí, y todo el equipo de Avaaz


Txai Suruí es una activista de 26 años que lucha por la tierra, el medio ambiente y los derechos de los pueblos indígenas. El territorio de su pueblo es uno de los más devastados por los efectos del cambio climático. Es la fundadora del Movimiento Juvenil Indígena de Rondonia, que reúne a la juventud de su Estado, y coordinadora de la Asociación de Defensa Etnoambiental Kanindé, una organización comunitaria que lleva 30 años trabajando con los pueblos indígenas.

Más información:

1. Txai Surui, el nuevo rostro de la defensa del Amazonas (France 24)
2. La sequía en la Amazonia se convierte en un problema medioambiental, económico y social (El Grand Continent)
3. ¿Quién es el sultán Ahmed Al Jaber, el magnate del petróleo que presidirá la cumbre del clima de Dubái? (Público)
4. Petrobras recibe un respaldo del Fiscal General de Brasil para explorar el Amazonas (Bloomberg)
5. Ecuador, el petróleo del Yasuní y la trampa de las finanzas globales (Climática, La Marea)